Dentro de la prosa romántica podemos
distinguir varios géneros:
1. NOVELA HISTÓRCA:
Como
consecuencia de la exaltación del pasado legendario surgen narraciones
ambientadas en la Edad Media, cuyo modelo fue el novelista escocés Walter Scott
(Ivanhoe). Los escritores románticos
se sintieron atraídos por la narración de historias sobre personajes heroicos
de la Edad Media. Veían representado en el caballero medieval el ideal de
persona libre y solidaria que anhelaban ser: libre porque no estaba sometido a las ataduras
cotidianas del trabajo, de la familia o de las obligaciones sociales; solidaria porque actuaba
para ayudar a los más necesitados, socorrer al indefenso y reparar injusticias.
En España el representante más importante del
género fue Enrique Gil y Carrasco con su obra:
El señor de Bembibre;
2- PROSA COSTUMBRISTA:
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LOS CUADROS DE COSTUMBRES
El costumbrismo había comenzado en el s. XVIII, cultivado
especialmente en periódicos, y alcanza su esplendor en la década de 1830. su
objetivo es describir al pueblo, por lo que constituyen un testimonio perfecto
de los cambios que se estaban produciendo en España.
Los representantes más importantes de esta tendencia serán:
- Ramón Mesoneros Romanos
(1803-1882). Toma la ciudad de Madrid como espacio básico y analiza personajes
pintorescos de la vida cotidiana. Escribió Escenas matritenses (1842).
- Serafín Estébanez Calderón
(1799-1867). Con sus Escenas andaluzas (1847), muestra
un exaltado nacionalismo y un rechazo por todo lo extranjero, especialmente por
lo francés.
- EL ARTÍCULO PERIODÍSTICO: Pero
sin duda, será Mariano José de Larra
(1809-1837) la figura más importante de la prosa en este periodo. Cultivó el
periodismo, la poesía, el drama y la novela; pero será en el periodismo donde
mejor exprese el costumbrismo, a través del artículo de opinión. Larra agrupó sus artículos de la siguiente
manera:
. Artículos de costumbres: en ellos se ponen en
evidencia los defectos y los vicios de la sociedad española, frente a la
modernidad y la eficacia de otros países europeos. Su deseo es el progreso de
una sociedad estancada en la pereza y el atraso. Larra lanza sus dardos contra
la ignorancia, la hipocresía; contra fiestas y espectáculos, como el de los
toros; contra el funcionariado o la policía. Ej.: “En este país”, “Vuelva usted
mañana”, “El castellano viejo” o “El café”
. Artículos de crítica literaria: son un verdadero
documento de la situación literaria de la época. Denuncia sin contemplaciones
la falta de calidad y la mediocridad de autores y actores, y defiende lo que
considera que es fruto de una verdadera creación artística. Ej.: “El Trovador”.
. Artículos políticos: corresponden a los últimos
años de su vida. Están centrado en el análisis crítico de las gestiones
gubernamentales del país y se articulan en torno a dos principios básicos: la
defensa de la libertad y la denuncia de la injusticia. En ellos Larra se
muestra más pesimista y desencantado; es decir, el Larra defensor de sus ideas
liberales deja paso al Larra del desengaño y de la desesperanza, próximo ya a
su suicidio. Ej.: “El día de difuntos de 1836”.